13 oct 2015.- Que los teléfonos “inteligentes” (Smartphone) están teniendo un rápido crecimiento en México es un hecho, y todo indica que llegarán a ser el dispositivo dominante en el uso de internet. Esa es la realidad actual, no la que difundió recientemente la empresa GCE («¿Qué tan conectado está México?»), que con afanes futuristas atribuyó a estos dispositivos, desde ahora, el dominio de internet en nuestro país.
La propia industria de telefonía desmiente tal aseveración. En marzo pasado la Groupe Speciale Mobile Association (GSMA), organización mundial de operadores de telefonía celular, señaló que en México las conexiones a internet mediante celulares se realizan mayoritariamente con teléfonos convencionales y solamente 20% con Smartphones. Este porcentaje colocaba al país en el sótano de América Latina en el uso de estos dispositivos, solamente por arriba de Perú.
Aunque GSMA prevé que en los próximos cinco años los Smartphone saltarán en México del 20% de las conexiones móviles al 62%, calcula que el mayor crecimiento en el uso de esta tecnología se dará en Chile, Venezuela y Brasil. En tanto, México seguirá ocupando el penúltimo sitio en la región debido a la desigualdad económica y a problemas de acceso a servicios móviles. [Ver: México lento en adopción de Smartphones.]
Incluso estimaciones optimistas ubican a los teléfonos “inteligentes” en una posición secundaria entre los dispositivos de acceso a internet en México. Los datos que manejó este año la Asociación Mexicana de Internet (Amipci), apoyados con las cifras de Inegi, indican que la conexión a internet mediante Smartphones pasó de 49% en 2014 a 58% en 2015, con lo cual supera a las PC (54%) pero sigue debajo de las laptop (68%).
Respecto a las actividades online, Amipci identifica en primer lugar el acceso a redes sociales (85%), seguido por búsqueda de información (78%), correo electrónico (73%), chats (64%) y otras. Esta jerarquía se mantiene entre usuarios de Smartphone, donde la principal actividad es hablar por teléfono (94%) y en orden decreciente: navegar en internet (87%), buscar información (79%), correo electrónico (77%), ver archivos (63%), leer noticias (60%), descargar música-fotos-videos (57%) y otras.
Estas preferencias se modifican ligeramente cuando el uso de internet es únicamente con fines de ocio. [Ver: Hábitos de los usuarios de internet en México 2015.]
LOS TELÉFONOS Y LA INTELIGENCIA
Otra aseveración desproporcionada es la que han realizado algunas empresas publicitarias al afirmar que el uso de ciertos teléfonos “inteligentes”, como el iPhone, se relaciona con mayor grado de escolaridad y nivel de ingresos (incluso mencionan el color de piel). Y se entienden tales aseveraciones cuando se busca vender un producto a toda costa, intentando generar expectativas y aspiraciones.
Si la presunta “inteligencia” añadida a los equipos fuera eficaz, los automóviles ya no chocarían ni atropellarían peatones, y los misiles no destruirían hospitales. Más aún, los contenidos que circulan en las redes sociales no serían severamente criticados precisamente por personajes de alto intelecto, como el semiólogo y escritor Umberto Eco.
Hace unos meses, Eco declaró: “El drama de internet es que ha promovido al tonto del pueblo al nivel de portador de la verdad. Las redes sociales le dan derecho de palabra a legiones de imbéciles que antes hablaban sólo en el bar después de un vaso de vino, sin dañar a la colectividad, que enseguida los callaba”.
De tan evidente a veces se olvida (bajo la oleada de publicidad) que por más “inteligencia” agregada en el chip, los instrumentos siguen dependiendo de la capacidad intelectual de quien los usa.
En México, los Smartphones todavía no son tantos como se afirma y aún no determinan la dinámica ni los contenidos en internet. Lo que sí es un hecho es que ni hacen más inteligentes a sus propietarios ni su expansión como mercado garantiza una mejora tangible para la sociedad.
[Gerardo Moncada]